Tarta helada de uva

Hola mis queridos lectores, es un placer saludar en domingo aunque no sea para un blog, ya que esta vez les traigo una receta, ¿de qué? Lo adivinan, un reto.

Esta receta corresponde al reto Color y Sabor de temporada y estoy participando del lado de lo dulce con un tarta helada de uva. He estado analizando mis fortalezas y debilidades y he resuelto que lo que más se me da, son los postres que van fríos o congelados y para muestra, esta delicia tan morada que bien podría ser prima de Barnie.

Antes de seguir adelante, quiero pedirles que pasen a dar un vistazo en el blog Postres Originales, donde podrán encontrar más información acerca de este reto, que si te gusta cocinar y tienes un blog, seguro te animas.

Como les he comentado, mi postre es de uva, pero he hecho un poco de trampa y he puesto sabores concentrados o artificiales además de naturales para que la puedan disfrutar sin importar la época del año. Es una receta fría, pero si son golosos como yo, no les importara estar con la chamarra puesta disfrutando este helado. Ahora sí, vamos con los ingredientes:

• 6 yogures de uva en presentación pequeña (45g cada uno)
• 180g leche condensada
• 1 paquete de galletas maría (o galletas de vainilla de las que tengas a mano)
• 2 cucharadas de mantequilla o margarina
• 1 sobre de concentrado en polvo para preparar agua de uva
• Agua
• 1 taza de uvas

Lo que haremos primero, será triturar las galletas y al polvo añadimos la mantequilla derretida previamente, junto con dos cucharaditas del concentrado en polvo de uva. Colocamos en un refractario y ponemos un poquito de agua, les recomiendo comenzar con dos cucharadas e ir aumentando según lo requiera hasta formar una pasta que sea fácil compactar. De esta forma nuestras galletas cogerán sabor a uva y un color morado que seguro gusta a los niños. Congelamos durante una hora.

Después licuamos la leche condensada, con el yogur y el resto del polvo concentrado. Esto lo colocamos encima de la pasta que ya teníamos congelando. Encima colocamos las uvas colocadas en mitades y congelamos por unas 4 horas. Se sirve frío y recién salido del congelador.

La receta es deliciosa, pero ustedes pueden añadir cambios, como poner azúcar o no poner leche condensada, no poner polvo concentrado de uva y en vez de eso licuar una taza de uvas, etc. De cualquier forma, aquí les dejo otra versión de tarta helada de uva, que también ha sido todo éxito. Espero que se animen a probarla, déjenme saber en los comentarios, quien quiere un pedacito.

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